(ES) Crónica: 2º Encuentro de Titiriteros de Euskal Herria
Los días 3, 4 y 5 de octubre, Euskal Herria tuvo su epicentro titiritero en Bidasoaldea, donde se tejieron redes de resistencia que unieron tradición, comunidad y voces internacionales.
Un taller inaugural: Reflexiones sobre el títere popular
La segunda edición del Encuentro de titiriteros de Euskal Herria en Bidasoaldea arrancó el 2 de octubre de 2025 con un taller impartido por Borja Insua, de la compañía gallega Títeres Alacrán.
Este taller, de ocho horas de duración, tuvo como objetivo principal reflexionar sobre la vigencia del títere de guante popular y tradicional. Bajo estos dos conceptos –lo tradicional y lo popular– se generó un debate prolífico pues al existir varias teorías sobre estos conceptos los participantes pudieron compartir sus puntos de vista.
Borja, con una vasta trayectoria en la manipulación del personaje gallego «Barriga Verde», compartió su experiencia sobre cómo actualizar esos arquetipos tradicionales que perviven en la memoria colectiva.
Se destacó la importancia de las estructuras dramáticas propuestas por la tradición, así como la necesidad de traerlas a las problemáticas actuales para revitalizarlas. Al fin y al cabo, este tipo de títeres logra una catarsis en el público, permitiéndole identificarse con esa libertad de vivir sin las limitaciones de los sistemas establecidos, además de abordar la justicia ante situaciones injustas con resoluciones viscerales.
Alumn@s del curso realizan rutinas con los títeres
Foto: Gari Garaialde / Bostok Photo
La escena se activa: Nueve funciones como acto de resistencia
El viernes dio comienzo la maratón escénica, que durante un fin de semana ofreció nueve representaciones entre Irun y Hondarribia. Este paréntesis titiritero se erigió como un auténtico acto de resistencia ante la vorágine cotidiana, invitando al público a detener el tiempo y contemplar. El euskera y el territorio histórico de Euskal Herria actuaron como el hilo conductor de una programación que, en su diversidad, celebró un patrimonio cultural común: los titeres.
Destacados de una cartelera diversa y con sello propio
La programación brilló por su variedad de formatos y búsquedas artísticas en la que cada función fue un universo único por descubrir.
Solamente SOS, de Santi Ortega: El único espectáculo íntegro para adultos en esta edición creó un espacio íntimo en la asociación de vecinos de Elitxu, convocando a un público cercano, curiosamente la mayoría mujeres. Como es el espíritu de este encuentro el encontrarnos nos llegó de sorpresa el grupo Maletas mágicas quienes generosamente nos compartieron sus marionetas de Las Catrinas, animadas por Carlos López y Cecilia Casariego. Para facilitar la conciliación, se habilitó un espacio de cuidado de menores. Santi Ortega se mostró como un antihéroe del amor y crítico de lo cursi. La propuesta escénica se entreteje por variados formatos, títeres de guante, ventriloquía, vídeos performáticos y sus composiciones musicales abriéndonos la puerta a un mundo que requiere de la ironía para ser entendido. Al final, nos quedamos con esa imagen desnuda del creador, que no pretende ser ni estética ni políticamente correcto, y así logra sumergirnos en Solamente SOS un mundo lleno de reflexiones sobre las experiencias del amor, desamor y de la vida misma.
La Cia Maletas mágicas momentos antes de comenzar su función sorpresa.
Foto: Gari Garaialde / Bostok Photo
Babaluva y La hija de Cacharulo: Mirari Urruzola realizó su primer estreno en euskera en la asociación de vecinos de Dumboa. Este espectáculo familiar nos transporta al mundo de los pescadores y el mar. Mediante diversas técnicas titiriteras, primando el títere de guante en la escena, entrelaza historias con canciones tradicionales, esta puesta en escena trasciende al relato para abordar mensajes de profunda calidez filosófica.
Katxaruloren Alaba de Mirari Urruzola en Hondarribia.
Foto: Gari Garaialde / Bostok Photo
Baleazaleak de Ostomila: En el patio de la escuela Toki Alai esperaba un público numeroso. Baleazaleak es una puesta en escena conmovedora y combina la música coral vasca con el títere de guante. La obra narra la historia de Selma Huxley, cuyo secreto es descubierto por Elaia, una niña con ansias de conectar con sus raíces. La obra se centra en la conexión entre los vascos y el pueblo Mi´kmaq, la escena se centra en una sucesión de imágenes poéticas combinadas con la música en vivo que logran remover emocionalmente al público.
Un momento de música coral vasca en Baleazaleak en el colegio Toki Alai
Foto: Gari Garaialde / Bostok Photo
Larraitz Urruzola y Joan etorriko istorioak: En la asociación de vecinos de Larreaundi, en un espacio íntimo, la actriz Larraitz Urruzola nos llevó por las historias que la han marcado. A partir de objetos emprendemos este viaje, Larraitz nos enseña un disco LP, el mismo que en su infancia contaba dos historias que marcaron su vida en Euskal Herria. La combinación de euskera y gallego, junto a una escenografía sencilla construida con diversas maletas, cautivó a todos los presentes. Rosalía de Castro recitando versos, aquellos versos que recuerda Larraitz declamando su padre. Joan etorriko istoriak es una obra en la cual la memoria nos transporta a otros tiempos y lugares.
Rosalia de Castro narra poesia en Joan Etorriko historioak de Larraitz Urruzola.
Foto: Gari Garaialde / Bostok Photo
El Tenderete y Hamaika gatazka: La histórica compañía de Bizkaia, El Tenderete, nos compartió una de sus obras de repertorio, una puesta en escena de marionetas desenfadada y cargada de crítica social en la kultur etxea de Hondarribia. José Ignacio Andino, Lito, y Manya Fernandez son los que dan vida a las marionetas, su obra nos presenta a los arquetipos como el policía o el político corrupto quienes quieren desalojar a dos personajes que solo ansían una vida tranquila. Con esta presentación logramos revivir ese teatro de repertorio tan importante y así poder evocar y vivir en escena otras épocas del teatro de títeres de este territorio.
Hamaika Gatazka de la Cia El tenderete en Hondarribia
Foto: Gari Garaialde / Bostok Photo
Sorginduak y El viaje de Pruden: Cristina Torres y Celeste Caruso iniciaron la jornada dominical, en la asociación de vecinos de Landetxa, con un espectáculo que fusiona el musical con el teatro de títeres. Utilizando la cámara negra y juegos de luz, narran el viaje de autodescubrimiento de una hormiga, Pruden, una metáfora sobre la transformación y el despliegue de nuestro potencial interior.
Prudenen Bidaia de la Cia Sorginduak. AAVV de Ventas
Foto: Gari Garaialde / Bostok Photo
Un cabaret global: La solidaridad hecha títere
La noche del sábado se transformó en un Cabaret, una fusión única entre músicos y titiriteros que durante dos horas exploró diversos registros. La verdadera relevancia de la velada fue su dimensión internacional, con la presencia de artistas de Colombia, Nicaragua, Azerbaiyán, Canadá y Palestina. En un momento de especial emotividad se concedió el altavoz a Mousa Nidal Kathib de Tantoura Teatro de Palestina. Proveniente de una familia de titiriteros de Ramala, Mousa compartió en primera persona un documental sobre la historia de su grupo lleno de resiliencia y lucha. Este titiritero palestino con tan solo 23 años, realiza funciones para niños refugiados en España usando un títere confeccionado por su padre, Nidal Khatib, un compañero inseparable en su viaje migratorio. Su testimonio y sus historias, como la del ladrón de Jericó o la masacre de Tantoura, recordaron poderosamente la función universal del títere para conectarnos.
Un extracto de Mar de Sonores de la joven titiritera Naia MJ durante el cabaret
Foto:Gari Garaialde / Bostok Photo
Una apuesta por el futuro: Descentralización y red comunitaria
El encuentro no solo fue programación artística, sino una firme apuesta política por descentralizar la cultura y llevarla a la base. Su éxito se sustentó en la autogestión y en la red social tejida desde Ostomila, con la colaboración fundamental del Club Mayumi el cual fue clave para la puesta en marcha de una txosna/barraca en las fiestas de Irun en junio 2025. También la red de amigos y titiriteras y titiriteros que nos brindaron su tiempo en especial a Santi Ortega. El apoyo de las asociaciones vecinales, el AMPA de Toki Alai y el Ayuntamiento de Hondarribia fueron clave para llenar de público cada actividad, reuniendo a aproximadamente mil espectadores entre todas las muestras de trabajo.
El cierre de esta segunda edición es la promesa de continuar por este camino. La conexión establecida con tres grupos de títeres de Iparralde será la gran sorpresa para la tercera edición. Pues aunque estamos apenas diciendo adiós a esta segunda edición, ya nuestra mirada está puesta en la siguiente. Este encuentro ha creado una expectación palpable en Bidasoaldea en la cual grandes y pequeños ya esperan con ansias encontrarse en un nueva programación para seguir soñando, apostando y luchando por un teatro de títeres hecho aquí y para los de aquí.
Gora txotxongiloak, gora txotxongilolariak!
Un extracto de la actuación de grupo de Txalaparta TuKuTun durante el Cabaret
Foto: Gari Garaialde / Bostok Photo